
Remedios para aliviar la paradoja tecnológica
Las oportunidades que abren los sectores que integran la denominada “economía del conocimiento”, con la industria del software como punta de lanza y en pleno proceso de transversalidad con el resto de las actividades, están envueltas en una paradoja: son los únicos rubros que crecen en plena recesión. Y podrían hacerlo con más fuerza, pero les faltan los brazos adecuados.
Desde su despegue, conviven con un fantasma demasiado real: la brecha entre la demanda de las empresas y la oferta de los perfiles laborales que se buscan.
Sólo en Córdoba, las compañías tecnológicas están en condiciones de crear, de un día para el otro, al menos tres mil nuevos puestos calificados y formales, toda una rareza en el sufrido mercado laboral. Pero no lo hacen por el simple hecho de que no están las personas con las habilidades para esos empleos.
Por lo tanto, es evidente que las acciones del presente, en cantidad y en calidad, definirán el futuro. La buena noticia es que ha asomado una política de Estado para crear los remedios que puedan aliviar la paradoja.
Gobierno, empresas, universidades y organizaciones no gubernamentales se han lanzado a compartir espacios y programas de trabajo para formar y capacitar capital humano y, de esa forma, aumentar las oportunidades para las dos puntas de la cadena.